Horizon en Alicante
Visita en el puerto
⚓ Brook Hill Snow, redactora de Cruise Travel, una de las revistas más importantes de cruceros de todos los tiempos, iniciaba su review sobre el Horizon en el número julio de 1991 con esta frase: There’s something new on the horizon. It is the Horizon. No fue un alarde de originalidad esta forma de introducir un barco que llevaba navegando un año con la naviera Celebrity Cruises, que actualmente pertenece al grupo Royal Caribbean y que por aquel entonces era filial de la griega Chandris. A pesar de este ingenuo comentario, el resto del artículo alababa de forma brillante las virtudes de este nuevo barco.
El paso del tiempo ha provocado que algunas de las grandes virtudes del primer Horizon hayan quedado eclipsadas tras la inauguración de mil y un barcos de cruceros, sin embargo el primer epíteto que recibe el barco de parte de Brook Hill Snow aún sigue presente en el Horizon: elegancia. Y es que a pesar de los años transcurridos desde su inauguración este buque aún conserva su encanto y una, cada vez más anhelada, clásica distribución de las zonas comunes.
Horizon en Alicante: La visita
La visita comenzó al mediodía y la anfitriona, muy atenta durante toda la jornada, me acompañó hasta el bufé -Le Marche Gourmand- del buque en la cubierta 11, para que pudiera comprobar la calidad de la gastronomía del Horizon. Pese a que el bufé no es de gran tamaño, la calidad de su comida está fuera de toda duda. Degusté diferentes platos y todos ellos superaban ampliamente la categoría de aceptable. La distribución de las islas es la típica de otros barcos de cruceros, contando incluso con una zona de grill entre el bufé y la terraza de popa.
Después de comer y tras hidratarme convenientemente -el sol de Alicante era de justicia ese día- comenzó la visita por las distintas instalaciones del buque. Tomando como punto de partida el lugar en el que me encontraba, fuimos descendiendo cubierta a cubierta realizando un completo tour por todas las zonas comunes del buque.
En dirección proa la zona de piscinas se encontraba semivacía -las playas alicantinas fueron suficiente reclamo para que los cruceristas abandonaran el Horizon-. Equipada con dos piscinas, una de ellas para niños, y dos jacuzzis, este es el lugar idóneo, junto con el solarium de la cubierta superior, para que los cruceristas tomen el sol o disfruten de una bebida en compañía. Si en un extremo de la zona de piscinas está el acceso al bufé, en el otro extremo el atractivo Zéphir Loung Bar da paso a los mejores camarotes del barco. Lamentablemente el barco viajaba con la totalidad de estos camarotes ocupados y fue imposible revisar las distintas cabinas, con la excepción de una interior.
Desde Zephir descendimos hasta la cubierta 8 (Cobalt), una de las dos cubiertas interiores que atesora parte de la vida pública. En proa el Le Grand Theatre, teatro de dos plantas clásico, con mesas para depositar la bebida o cualquier otro elemento. Junto a este, la sala de videojuegos y el club de niños en babor y un funcional casino a estribor dan paso al Café Moka de forma semicircular y de gran tirón, sobre todo entre los pocos cruceristas que continuaban a bordo. Continuando hacia popa, y tras dejar atrás los dos pasillos de tiendas -obviamente cerradas al estar el Horizon en puerto- llegamos a la discoteca Saphir y al lugar más sugerente del barco, el que comprende el James Le Piano Bar, la Biblioteca y el Salón de Cartas.
Quizás son estas tres instalaciones las que destilan más elegancia. Con una decoración muy cuidada en el que domina el revestimiento y mobiliario en madera, es el contrapunto al citado club Saphir de líneas más modernas, a pesar de mantener elementos de las discotecas de los clásicos barcos de cruceros (como la pista de baile o los sillones).
Continuando con la visita descendimos una cubierta más (7 o Aigue Marine). En proa se halla la planta inferior del teatro, mientras que en popa el restaurante principal del barco, que con una superficie de 1500 metros cuadrados puede acoger a la totalidad del pasaje en sus dos turnos de cena. Entre este restaurante y el teatro, un espacioso salón Rendez Vous -de 347 metros cuadrados y con capacidad para 196 cruceristas- es escoltado por la oficina de excursiones, una sala de conferencias con capacidad para 50 plazas, la zona de internet y la omnipresentes tienda de fotos.
Descendimos a la cubierta 5 (Marin) para encontrarnos de frente con la recepción, que fue otro de los lugares que más llamaron mi atención. Sabía que no iba a encontrarme una recepción ubicada en un atrio espectacular, tan de moda últimamente, pero su diseño y decoración daban un toque muy elegante y atractivo. De allí, y aunque el tour estaba tocando a su fin, la anfitriona aún nos tenía preparada una sorpresa, ya que nos acompañó a uno de los lugares que muchos cruceristas quieren visitar: la cocina del barco.
Después de esta agradable sorpresa y antes de finalizar la visita, volvimos a la cubierta 12 (Ciel) y dejando atrás el bar Lannexe y el solarium nos dirigimos a popa para visitar el pequeño, pero utilitario spa del buque -equipado con distintas salas para disfrutar de los mejores tratamientos de belleza y bienestar-, el gimnasio y la sauna.
Jesús Rico, visitando el Horizon en Alicante.
Fotografías del Horizon
Fotografias Jesús Rico para Cruceroadicto.com
Nuestro agradecimiento a Pullmantur por todas las facilidades para realizar esta visita al Horizon en Alicante.
Conoce el Horizon