Somos muchos los cruceristas españoles que hemos navegado en el Grand Mistral de Iberocruceros, quizás fue el ¨buque insignia¨ no solo de la compañía, si no a mi juicio de la maduración del mercado crucerístico en España. Iberojet (antigua Iberocruceros) dio un gran salto cualitativo al operar este buque, pasaron del ¨Grand Latino¨ de 1973 y 28551 toneladas de registro bruto, al ¨Grand Mistral¨ construido en 1999 y 48200 toneladas, que sin desmerecer al hoy ¨Boudicca¨ de Fred Olsen, ofrecía una imagen renovada al producto enfocado al crucerista español.
Fue uno de los tres buques de nueva construcción encargados por la malograda Festival Cruceros a los astilleros de Saint-Nazaire en Francia, bautizado como ¨Mistral¨ y botado en 1999, era el primero y mas pequeño de los tres, sus hermanos de unas 10000 toneladas más grandes ¨European Stars¨ y ¨European Vision¨. Tras el fiasco financiero de Festival y un dilatado embargo fueron adquiridos por la emergente MSC Cruceros, quedando el ¨Mistral¨ que paso a manos de Iberojet.
Iberojet renombró el buque como ¨Grand Mistral¨ en 2004 y junto con el ¨Grand Voyager¨ en 2005 ofrecian una oferta moderna con barcos de reciente construcción. En 2007 sufrió una reforma en su popa, a la que le añadieron nuevos camarotes con balcón y que mejoraba las posibilidades de explotación del mismo, añadiendo una oferta de camarotes mas variada.
Era un barco equilibrado, no nos engañemos, no era un barco de relumbrón como podemos encontrar en otras generalistas, pero con un ratio de espacio por pasajero muy generoso, unos camarotes más que correctos, áreas comunes impecables, restaurantes funcionales, numerosos bares, coqueto casino, tiendas, discoteca con estupendas vistas a popa, un teatro acorde a las dimensiones…en resumidas cuentas, un buque moderno para el mercado español.
Sus itinerarios iban desde Fiordos y Báltico, pasando por cruces atlánticos y como no, nuestro Mediterráneo mas próximo e Islas Griegas, y en invierno pasando a operar en América de Sur.
La decisión de Costa Cruceros (matriz de Iberocruceros) de trasladar el buque a las sus filas, así como al ¨Grand Voyager¨, deja a la filial española los veteranos ¨Grand Holiday¨ y ¨Grand Celebration¨ que a pesar de su renovación no dejan de ser buques de los años ochenta, diseños que no encajan en un mercado que demanda algo mejor.
¿El producto de Iberocrucero es bueno? por descontado, pero nos merecemos algo mejor, no hay mas que ver la flota de Aida, filial del grupo también y enfocada al mercado de habla en alemán, con buques de ultima generación y de tamaño contenido, si es verdad que la situación económica de nuestro país y el alemán no tiene nada que ver, pero no es excusa para no haber mantenido al menos una calidad a la que nos tenia acostumbrados con estos barcos. Y no solo solo es política de Iberocruceros, vemos como la otra naviera de lengua española, Pullmantur, mantiene la flota con una edad bastante avanzada.
En conclusión, y como crucerista, hoy por hoy prefiero por precio similar embarcar en compañías que me ofrezcan buques acordes a los tiempos que corren a pesar que no sean todo en español, que el crucerista español esta un poco mas maduro que hace 10 o 12 años, y muchos ya no nos conformamos con buques añejos, que nos gusta disfrutar en un ambiente mas nuestro, pero no a costa de la calidad.
Por eso escribo este humilde articulo desde la tribuna de cruceroadicto.com como pequeño homenaje al ¨Grand Mistral¨, que seguro tendrá muy ¨buena proa¨ en su nueva andadura en Costa, pero que deja huérfana a la oferta crucerística en nuestro idioma.