La rutina de algunas actividades, especialmente matinales, hace innecesario que insistamos sobre ellas. He estado más pendiente de la zona de la piscina principal, ya que la tarde del día anterior se cerró por un tiempo al producirse la rotura de una botella dentro de la misma..
A una persona pasando muy cerca de la piscina con los habituales cubos con varias botellas se le cayó una junto a la zona de hamacas interiores de la piscina.
No parece que haga falta recordar a los cruceristas, por simple razonamiento, las precauciones que deben tomarse en zonas tan sensibles como las piscinas. Y máxime en esta ocasión, ya que la piscina infantil está casi adjunta a la principal.
Por otro lado, esta misma mañana en el Solarium otra persona, que luego advertí necesitaba de un bastón para caminar, saltaba de una a otra de las piscinas en cascada con el evidente riesgo, no solo personal, sino para el
resto de personas.
Lo lamentable de este caso es que el personal que supuestamente estaba pendiente sólo intervino la segunda vez y a raíz de advertencia externa. Eso sí, en pocos minutos, llegó personal de seguridad.
Para aclarar ambos casos solicité la pertinencia información de la compañía. Fui amablemente atendido por Elwin Bennet, responsable de mantenimiento en el Ovation of the Seas, quien me aseguró que el personal está advertido de todas estas circunstancias pero que extremarán las indicaciones en ese sentido.
Ahora, una curiosidad: en la información diaria se puede leer que entre los lugares de “comida de especialidad” está el Chef´s Table.
No busquéis un restaurante con ese nombre, no existe. Realmente es una zona intermedia exclusiva dentro del Wonderland, que sí es un restaurante. Se trata de una larga mesa, al estilo de esas grandes mesas que suelen encontrarse en las empresas para reuniones de directivos, incluido el jefe, claro. De ahí, el nombre.
Por la noche los redactores de CruceroAdicto en el Ovation hemos compartido charla con uno de los integrantes del grupo Forever.
Como son días de navegación en el Canal de Suez, se presta para escudriñar los pequeños detalles.
Algunos nos los apunta nuestro compañero-redactor en CruceroAdicto, Santiago Carrión:
● En el buffet no hay cucharas pequeñas en todas las zonas donde están los cubiertos. A veces es difícil encontrarlas. “Haberlas hailas,pero dónde…”
● Otro tanto puede decirse de los platos medianos: o grandes o pequeños. Como dice el refranero español: “Burro grande, ande o no ande”. No es que sea una molestia, pero…
● Lo que sí incomoda es conseguir que te hagan “un huevo frito”. Ya de por sí la zona habilitada para hacer tortillas al gusto de cada uno, dispone de muy poco espacio, que solo permite hacer dos al mismo tiempo. Que se formen colas, y sea éste prácticamente el único sitio donde hay que esperar, es la consecuencia de esta mala planificación.
Y ya metidos en el Canal de Suez hay que señalar que hemos contado con escolta doble. Por un lado, coches de seguridad rodaban en tierra por la carretera paralela a la dirección del barco y, por otro, un barco tipo remolcador.
Además, sobre las dos de la tarde contamos con la visita de periodistas y gráficos (supuestamente ya que no lo hemos podido confirmar) filmando y observando varios lugares del Ovation of the Seas. En la foto adjunta podrán ver, a la izquierda, el barco que los trasladó, en medio el barco de seguridad, y a la derecha, otro barco de carga, dentro del Canal, en dirección opuesta a la nuestra.
Les invito a ver la buena cantidad de fotografías y vídeos que los compañeros redactores de CruceroAdicto están publicando en las redes sociales.
Esta tarde, todos los niños del barco estaban en el Royal Theatre; allí se proyectaba, en 3D, la película Kung Fu Panda; el propio oso les recibía a las puertas del teatro.
Mañana toca el puerto de Aqaba y la visita a Petra, una de las maravillas que ineludiblemente hay que visitar.
¡Les esperamos!
