6 razones para quedarme en el barco de crucero al llegar a un puerto… y 3 para bajar a puerto
Llegar a una nueva escala en nuestro itinerario de crucero es siempre excitante y casi todos los pasajeros tenemos una especie de fiebre por bajar los primeros y explorar el nuevo lugar. Digo casi todos, porque en muchos viajes ( y ahora yo también), no todos los pasajeros corren con la bolsa, los tickets de la excursión en la mano y mirando el reloj al llegar a puerto. Los verás moverse a un ritmo pausado con una sonrisa en sus caras mientras ven cómo el barco se va quedando vacío poco a poco.
Hoy quiero compartir con vosotros cuáles son esas razones, que normalmente cruceristas veteranos, tienen para quedarse a bordo. Pero antes de nada quiero aclarar, que aunque por lo general suele suceder en escalas que ya han visitado antes, lo he visto en escalas que eran nuevas pero sin atractivo para ellos, o con malas condiciones climáticas.
RAZONES PARA QUEDARTE EN EL BARCO DE CRUCERO AL LLEGAR A PUERTO
NO HAY COLAS
Una vez que la mayoría de pasajeros han bajado a tierra tendrás el buffet, las cafeterías con sándwiches, pizzas y hamburguesas, las máquinas de helado, prácticamente para ti. Puedes caminar a cualquier lugar que desees y obtener rápidamente lo que estás buscando, sin esperar ni colas.
En los días de puerto, el barco está en silencio y puedes ir a la pista de jogging para correr sin la preocupación de esquivar a otros pasajeros y las numerosas sillas que se arrastran inevitablemente en el camino. El gimnasio también estará libre de multitudes, por lo que puedes realizar tus entrenamientos a tu ritmo y en cualquier equipo que desee.
TRANQUILIDAD Y RELAX TOTAL
Los salones y todos los espacios públicos están tranquilos en los días de puerto. Puede explorar y apreciar con calma algunos de los detalles y piezas de arte a bordo del barco. Es el mejor día para hacer ese tour fotográfico del barco sin nadie que moleste en la foto. Este es también un buen momento para disfrutar de un buen libro junto a la piscina o en un espacio interior tranquilo. ¿Qué mayor placer que una siesta no prevista en una cómoda tumbona en algún lugar junto a las piscinas o sillones de los salones?.
DESCUENTOS EN EL SPA Y SALÓN DE BELLEZA
Todos sabemos que algunos de los tratamientos en los increíbles SPA a bordo de un barco de crucero suelen tener precios prohibitivos para la mayoría. Justo los días de puerto es cuando se presentan los mayores descuentos para ellos. Es fácil ver ofertas de 2 por 1, tratamientos combinados y hasta un 40 por ciento de descuento sobre los precios regulares en un masaje u otro tratamiento de spa. Podrás descubrir esas ofertas en tu diario de a bordo del día de escala o en el propio SPA. Suele ser el día en que los pruebo.
PARTICIPAR EN ACTIVIDADES A BORDO
Que el barco esté en puerto no significa que no haya actividades a bordo. Los equipos de animación planifican actividades a lo largo del día para aquellos pasajeros que no desean bajar. Ahora es el momento de jugar mini-golf y subirte a los toboganes acuáticos, tirolinas, simuladores de surf y otras actividades sin colas y tantas veces como desees.
SER EL REY DE LA PISCINA Y JACUZZI
Las piscinas de los cruceros suelen ser un poco estresantes y concurridas en los días de navegación. Sin embargo estarán sólo para ti en los días de puerto. Localizar una tumbona cerca de la piscina, o en la mejor sombra no será un problema, y siempre un camarero te preguntará lo que deseas al haber poco público en la zona. Tumbarse y disfrutar del momento, la brisa, la luz del sol y la piscina casi vacía te hará sentir el rey del barco. Mucho más si queremos usar el jacuzzi. Con casi total seguridad será el único dentro.
CONOCER OTROS VIAJEROS Y TRIPULANTES
Al estar el barco casi vacío al encontrarte con otros pasajeros disfrutando el barco será muy fácil comenzar una amigable conversación. Incluso podrás charlar con oficiales y tripulantes de una forma más relajada. En estos días es cuando he conocido a mis mejores amigos cruceristas y a la mayoría de oficiales.
RAZONES PARA BAJAR DEL BARCO
Sin embargo hay algunos detalles que debo contar que quizás te animen a bajar del barco aunque ya hayas visitado la escala y tu plan original era permanecer todo el día a bordo.
Las tiendas están cerradas. Si tu plan era aprovechar este día para comprar con tranquilidad en las tiendas a bordo no podrás. Siempre que el barco llega a puerto o entra en aguas territoriales deben cerrar las tiendas. Sin embargo es muy probable que en el mismo puerto haya un mercado con tiendas locales donde podrás (sin alejarte mucho del barco) satisfacer tus compras.
Casino también cerrado. Juntamente con las tiendas es el otro servicio que es cerrado cuando se está en puerto o aguas territoriales de un país. Si tu plan era jugar quizás puedes hacerlo en el puerto al que llegaste. Hay algunos en el Caribe que son especialmente famosos como el de Aruba, y por lo general los casinos o centros de juego están cerca del puerto.
Mantenimiento del barco. Aunque realmente no es algo que te empuje a bajar del barco, los días en puerto es cuando se utiliza para realizar todos los trabajos de mantenimiento a bordo. A veces cierran cubiertas o secciones para poder pintar, barnizar o limpiar. En este caso un paseo cerca del puerto o cambiarnos a otra cubierta son simples soluciones.
Estas han sido las razones para quedarte en el barco al visitar una escala. Ahora ya conoces la causa de que algunos cruceristas nos quedemos a bordo, y quizás sea una buena opción para ti también.
¡Felices cruceros, nos vemos a bordo!
Jesus Garcia
Editor Jefe
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6 razones para quedarme en el barco de crucero al llegar a un puerto
Jesús García para CruceroAdicto.com.
Fuente y Fotos Diferentes navieras | Jesús Garcia.
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